UC - Entrevistas
Enrique Villén, uno de los mejores actores secundarios roba-escenas de nuestro país, nos ha concedido una entrevista donde nos habla de sus comienzos y de su manera de ver y sentir el mundo del cine. A veces crítico, a veces irónico, pero siempre sincero. No hay espacio aquí para nombrar todos sus trabajos, pero podrás haberlo visto recientemente en TV en las series "El síndrome de Ulises" y "Plutón B.R.B. Nero", medio donde ha hecho episódicos en las series más conocidas como "Hospital central", "Los Serrano", "Aquí no hay quien viva", "Los hombres de Paco", "El comisario", "Lobos", etc. En cine ha trabajado a órdenes algunos de los directores más importantes de nuestro país como Alex de la Iglesia, Fernando León de Aranoa, José Luis Garci, Gracia Querejeta, Bigas Luna, Pedro Costa o Vicente Aranda, protagonizando la película "Los managers", ópera prima de Fernando Guillén Cuervo, y efectuando secundarios en films recientes como "Siete mesas de billar francés", "Sangre de Mayo", "La distancia", "Los Borgia", "Princesas", "Ninette", "Crimen ferpecto", "Los lunes al Sol", "La comunidad", "Luz de domingo", "El día de la bestia", por poner algunos ejemplos, además de colaborar con jóvenes valores en más de 20 cortos. Ahora también se presta a colaborar con Universo Cinema en sus primeros pasos por la red. |
Sí, en el cine empecé tarde, a los 28 años. Algo así surge de repente, la vida es muy accidentada. Di mis primeros pasos artísticos muy joven, lo que pasa es que de mi sabe muy poca gente. Con 16 años trabajaba ya en salas de fiestas, era “showman”, monologuista, humorista, cómico e imitador y trabajaba en salas por toda España. Era un cómico de clase B, porque no eras conocido y siempre entrabas en sustitución de un cómico famoso. Así que cuando descansaba él, ibas tú. Luego me enrolé con la compañía Juan sin Miedo haciendo títeres en TV y hasta hacíamos la competencia a “La Guerra de las Galaxias”, cuando estábamos de gira llenábamos los campos de fútbol, porque éramos el único programa infantil de la época. Con eso estuve 2 o 3 años y luego me retiré, por cuestiones que no vienen a cuento, y regresé a los 24 o 25 años al teatro y hacía figuración en TV, donde nos llamaban auxiliares artísticos, y eso me sirvió de escuela: veías cámaras, veías como se movían los actores... yo estaba formado en el teatro y en la sala, y me faltaba formación de cámara. Y entonces me fueron dando papelitos, justamente cuando empezó el estrabismo en el ojo, que es por ceguera, no porque no me lo quiera operar ni nada eso, es porque ese ojo no ve. Y a partir del 1993, que empecé mi aventura televisiva con “Inocente, Inocente”, donde conocí a Alex de la Iglesia y Pedro Barbero, hicimos tres bromas, una de ellas mítica que vió todo el cine español y a partir de ahí empezaron a llamarme para hacer películas.
-Después, sin embargo, has aprovechado el tiempo y en pocos años te has labrado una carrera enormemente prolífica tanto en cine como en televisión, algo que no está al alcance de cualquiera, cómo lo has conseguido?
No he parado de luchar, de trabajar y de no desaprovechar ni una sola oportunidad, ya fuera pequeña o grande. Lo que siempre he tenido muy claro, es que cuando hago un proyecto, el proyecto no es mío, quizás por eso he repetido con tantos directores. Yo me adapto al director, a lo que él quiere.
-Has trabajado con algunos de los mejores directores de nuestro país, gente de la talla de Alex de la Iglesia, Fernando León de Aranoa o José Luis Garci, por ejemplo, y además has repetido varias veces con cada uno de ellos pese a lo diferente que es su cine y supongo que su manera de trabajar, cómo es tu forma de trabajar?
El actor es un instrumento, siempre hago la comparación con una orquesta sinfónica, si eres una flauta no suenas igual con un director u otro, si suenas igual o es que haces lo que te da la gana o es que eres un solista de la hostia o te han dado la oportunidad de serlo. Aún así uno no debe sonar siempre igual, es imposible hacerlo igual con Garci, Fernando o Alex, porque son totalmente diferentes las películas y sus guiones. Y porque el tono, el timbre, el color… todo cambia. Y si trabajas en una única clave, es difícil que encajes.
-En nuestro cine, se te podría considerar como uno de los mejores actores secundarios roba-escenas (aquéllos a los que en ocasiones se recuerda más que a los protagonistas), por qué crees que no tienes más oportunidades de hacer protagonistas?
No tengo ni idea. Yo hice un protagonista, “Los managers”, donde di el do de pecho y la película funcionó en taquilla, fue la ópera prima más vista el año. Supongo que a cada uno le llega su oportunidad a la hora que le llega. Fíjate en Mariví Bilbao, ha tardado en hacer un protagonista 70 años y lleva luchando en esto toda su vida.
-Existe algún papel o personaje que sueñes hacer?
Uno tiene que ser consciente de los papeles que puede hacer. Yo, por ejemplo, “El Quijote”, no lo podría hacer, a no ser que hiciéramos algo surrealista como hicieron Tip y Coll en su época. Hombre, si me lo ofrecieran en teatro, “El avaro” de Moliere, me encantaría, o “Cyrano de Bergerac”. Si fuera en cine, cualquier tipo de guión al estilo que hacen en Francia, allí se miran las historias y los actores, pero no se miran si son grandes, altos, guapos… Tú cuentas una historia de amor y cuentas una historia de amor de personas normales. Eso ocurre más en el cine francés y en el cine ingles que en el cine español que mira muchas veces a Hollywood.
-También andas metido desde hace tres años en la producción con Bisojo Interpretaciones, donde hablas de "una manera diferente de hacer… mirar cine”, como ve Enrique Villén el cine y que puede aportar su mirada al panorama actual?
Queríamos volver a lo que se ha olvidado y hacer algo nuevo. El slogan tiene una doble intención por aquello de que yo miro de una forma diferente. Al cine no se cuanto tiempo le queda, tal vez 10 años. El cine tal y como lo conocemos se acaba, ya no se rodará en negativo, se rodará en digital. Las salas de cine tienden a desaparecer, la gente verá cualquier estreno desde su casa a través de la red. El cine va a cambiar, espero que no acabe nunca porque el cine es una forma de mirar, de ver, de sentir… de cada pueblo, por eso hay que proteger el cine español porque es nuestra forma de sentir, de amar, de ver y de respirar. Y esto es algo que muy poca gente se ha dado cuenta.
- Y por qué el cine español parece atraer tan poco al público mayoritario?
Los españoles somos muy dados a ser críticos con nosotros mismos, yo creo que en España se hace muy buen cine… y muy malo, como en América. Allí se hacen 480 películas, de las cuales buenas son 50, aquí se hacen 120 y buenas son 15, la proporción es la misma, lo que pasa es que el mercado es más grande. Algo debemos estar haciendo mal porque no hay comunión entre el mundo del cine y el público, tal vez provocado porque no hay una protección del cine por parte de las instituciones, nadie ha querido hacer una buena Ley del Cine y tenemos un problema de financiación en España muy complejo. La televisión está financiada por la propia televisión y el cine está financiado por televisiones y el Ministerio. No hay dinero privado en el cine, eso es un error, pero para eso tienes que facilitar los medios a nivel fiscal.
-A través de Bisojo produjiste en 2006 un corto titulado “A ciegas…”, una historia de amistad entre un hombre ciego y su perro lazarillo que ganó el Goya al mejor corto de ficción...
Y por el cuál fui criticado y se me puso a parir. En el cine me siento muy respetado, pero en aquella época hay gente a la que se le fue la pinza y cuando me dieron el Goya como productor, algún que otro cortometrajista avispado y mal documentado, se creyó que nos los dieron por que estaba Garci. Quien sepa un poco del mundo del cine, sabe que tú puedes salir nominado, pero jamás te van a dar un Goya por estar con Garci.
- Y qué te decidió de este proyecto para pasarte al otro lado e implicarte más?
Fue por accidente, un día en una comida, estando con un ayudante de dirección con el que había hecho tres películas, me dijo que tenía un guión, que le gustaría que fuera el protagonista y que lo iba a producir José Luis (Garci), aunque le faltaba un porcentaje del presupuesto. Yo me leí el guión, me gustó y le dije que si quería le financiaba el resto. Hicimos el corto y una vez que lo vimos, nos pareció que estaba muy bien, con una factura muy clásica pero interesante. Contamos con un equipo excelente que mezclaba gente experimentada con gente joven, decidimos presentarlo a los Goya y nos lo dieron.
-Has participado también en muchos otros cortos, lo consideras una fuente de aprendizaje o te interesa como medio en sí mismo?
Yo llevo 27 cortos hechos, casi cada año hago uno. El cortometraje me parece una de las expresiones más libres que hay y los hago porque creo que hay que apoyar a la gente joven, a los nuevos cineastas. Es una obligación como actor. Siempre he defendido el corto y siempre lo defenderé. Eso sí, cuando hay que poner a la gente en su sitio también lo hago.
-Y tienes nuevos proyectos para tu productora?
Estoy intentando producir, tengo un proyecto para una televisión nacional, otro para una autonómica y un proyecto de cine, pero aún estamos en ello. Va todo muy, muy y muy despacio, porque yo soy muy, muy y muy pequeño.
- Te has planteado más adelante incluso dirigir?
No, yo no soy director. Podría dirigir actores, pero nunca podría dirigir una película. Un director en cine tiene que ser realizador y director, para estar completo, para eso hay que saber, yo sé de estar delante de la cámara no detrás, bastante tengo con lo que tengo.
- Tengo entendido que tu participación más reciente ha sido en el cortometraje “El encargo” de Sergio Barrejón, estás rodando alguna cosa o tienes pendiente de estreno algún proyecto del que nos puedas comentar algo?
Este corto está nominado a los Goya, ya le darán de hostias si lo gana a mi amigo Barrejón, jaja. En Marzo volverá "Plutón BRB Nero" con unos capítulos que quedan por emitir y en principio eso es lo que hay. Del resto no se puede hablar, porque esas cosas se joden.
- Para finalizar, me gustaría saber como "sientes" el cine, que significa para ti.
Ya ves como siento el cine, como que forma parte de mi. Esto es un veneno que te mata o te retira. Es como “La vida es sueño”, un día te levantas y tienes que ir a una promoción, pero resulta que hace tres meses que no trabajas. Te pagan el avión para el viaje, vas a un estreno con la alfombra roja, te visten de gala, la gente te aplaude, vas a una fiesta, vives en un hotel de cinco estrellas… y al día siguiente vuelves a tu casa y sabes que no tienes ni para pagar la hipoteca. Son las luces y las sombras del cine. Como dice mi amigo Javivi “Disfruta de e-estos mo-mentos, mañana volveremos a-a nuestras tris-tristes vidas” (imitándolo).
-Muchas gracias, Enrique, por conceder a UC esta entrevista.
Que tengáis suerte.
Entrevista realizada por Daniel Farriol.
VER CORTO "A CIEGAS"
A CIEGAS from Enrique Villén on Vimeo.